El curso 2020/21 ha comenzado para los jugadores de la Escuela Nacional Blume, tanto para los que se forman en la sede de Madrid -por la que ya han pasado 31 promociones- como para los que lo hacen en la de León, que lleva en funcionamiento desde 2014. En total son siete las caras nuevas que se suman al proyecto en esta temporada tan peculiar.

En la Blume madrileña, por la que han pasado Jon Rahm, Azahara Muñoz, Jorge Campillo, Pablo Martín o María Hernández, las novedades son el malagueño Ángel Ayora y la guipuzcoana Paula Balanzategui, que vienen a paliar las bajas de Constanza Guerrero, Ainhoa Gurrutxaga, Nieves Martín, Odette Font y Javier Neira tras un productivo periplo en el que han acumulado aprendizaje y experiencias.

Continúan en Madrid Daniel Robles, Eduardo de los Ríos, Juan Luis de Bethencourt, Ana Pina, Julia López, Marta López y Lucía López, jugadores, todos ellos, con experiencia sobrada en las principales competiciones nacionales.

Cabe señalar que este curso, con la finalidad de adaptar el funcionamiento a las exigencias sanitarias provocadas por la pandemia, se ha visto reducido provisionalmente el número de becas en la Residencia Blume para todos los deportes.

Por decimosexto año consecutivo, los entrenamientos diarios del grupo de Madrid se realizan en el Centro Nacional de Golf, una de las múltiples finalidades para las que fue concebido.

Cinco cambios en León

En el centro hermano de León se han producido más cambios. Continúan en el grupo Ignacio Cervera, Pablo Rebolleda y Álvaro Ruiz de Huidobro, y han aterrizado el albaceteño Ángel Soria, el murciano Ángel Pérez, el salmantino José María Rozas, y las malagueñas Mar García y Rebeca Fernández.

La Escuela Nacional Blume de León, que cumple siete años, es un proyecto en el que también participan de forma conjunta con la RFEG las distintas Federaciones Autonómicas y el Consejo Superior de Deportes. Los jugadores seleccionados reciben formación deportiva en las instalaciones del Centro de Alto Rendimiento de León y del Club de Golf de León, y académica en el Colegio Leonés, un centro con más de 100 años de historia.

El Centro de Alto Rendimiento permite realizar trabajo bajo techo en jornadas de climatología adversa, mientras que el Club de Golf de León posee un campo de reconocido prestigio con una cancha de prácticas y un putting green de grandes dimensiones.

Además, todos los componentes de la Escuela Nacional tienen a su disposición, desde el comienzo de la temporada, el Centro de Excelencia del Golf, una instalación de vanguardia, ubicada en la cancha de prácticas del Centro Nacional en Madrid, construida con el objetivo de aumentar el número de jugadores españoles entre los 100 primeros del Ranking Mundial tanto en el ámbito amateur como profesional.

Los mejores profesionales a su disposición

Los jugadores de las dos escuelas lo tienen todo a su disposición para centrarse en las facetas deportiva y académica. En el día a día, los madrileños cuentan con la ayuda en la coordinación de Laura Moreno, que es la encargada de que todo, empezando por los horarios, funcione como un reloj. En León este papel lo desempeña con el mismo acierto Alberto Díaz.

Salva Luna, Director de la Escuela Nacional, Kiko Luna, Álvaro Salto y Jorge García son los responsables técnicos, llamados a continuar formando a los jugadores en el campo.

En ambas escuelas, la parcela psicológica corresponde a un profesional de dilatada trayectoria como Óscar del Río, y Paco Fernández y Álvaro Gil son los encargados de facilitar a los alumnos las herramientas necesarias para que alcancen un óptimo nivel físico. La coordinación general recae en la figura de Ignacio Gervás, Director Deportivo de la RFEG.

Consulta los componentes y palmarés de la Escuela Nacional de Golf 2020-21, así como los integrantes de anteriores generaciones más abajo, en el apartado de Enlaces relacionados.

Asimismo, consulta el vídeo presentación de la generación 2020/21 de la Escuela Nacional Blume.